La comisión, presidida por el diputado Vega de la Coalición Cívica, intentará debatir el proyecto presentado por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto y otro similar, a los que se agregó, subrepticiamente, un proyecto reciente del propio Vega que propone modificar el artículo 86 actualmente vigente, reduciendo a 12 semanas la posibilidad de interrupción del embarazo en los casos de aborto no punible. (ver recuadro)
Esa maniobra desató la polémica con las referentes de la Campaña y las diputadas de distintos bloques que firmaron su proyecto que ahora debaten si darán o no quórum para que se sesione.
Manotazos de ahogado
La oposición derechista –derrotada en las primarias- intenta embretar al kirchnerismo metiendo el dedo en una de sus llagas, como el derecho al aborto. Un tema sobre el que están en contra la mayoría de los gobernadores, intendentes y diputados K y hasta la mismísima presidenta.
Aprovechando esa brecha, y como manotazo de ahogado, Vega convocó al debate repentinamente en la comisión que preside. “El pueblo argentino debe saber cuáles son las opiniones de sus diputados y sobre todo de los distintos candidatos sobre el tema del aborto”, dijo el diputado egresado de la Universidad Católica, aclarando que su mandato termina “el 10 de diciembre, gracias a Dios y a los Santos Evangelios.”
Detrás suyo, se restriegan las manos la derecha más recalcitrante, los fundamentalistas como Cynthia Hotton y los jerarcas de la Iglesia, dispuestos a iniciar una nueva cruzada reaccionaria con bochornosas manifestaciones de colegios religiosos y aprietes de los obispos a diputados y gobernadores, como ya hicieron cuando se trató la ley de matrimonio igualitario.
Controversias en el seno del gobierno
Los progres K y de la centroizquierda, incluso la misma Campaña, quedaron entrampadas en el juego que propuso la derecha, que después de cajonear durante años distintos proyectos para que caducaran y de aplazar los tiempos para el tratamiento de este reclamo, lo sacan a la luz en medio de la campaña electoral.
Ni los K ni sus aliados están dispuestos, ahora, a tratar un tema controversial que saben que generará fuertes reacciones en la cúpula de la Iglesia y sectores fundamentalistas, transformándose en un debate nacional que podría alterar las tranquilas aguas de una campaña electoral con resultado cantado para el gobierno de Cristina.
El oficialismo quiere evitar que la Iglesia y la derecha aparezcan atacando al gobierno porque algunas de sus diputadas aprueban la legalización del aborto. Pero, también temen que el debate obligue a la coalición gobernante a definirse claramente sobre un tema que genera enormes controversias en su propio seno, que como se sabe, incluye no sólo la negativa explícita de Cristina Kirchner a avanzar con la despenalización del aborto, sino también –como señalan algunos funcionarios- su disposición “a desalentar y hasta a frenar a los legisladores oficialistas que apoyan esos proyectos”.
El resultado es que la derecha le ganó de mano al progresismo y quienes apoyan la legalización del aborto son, ahora, los que se ven obligados a explicar por qué no quieren debatirlo.
¿Cómo avanzar?
La Iglesia ya fue derrotada por la amplia simpatía que tuvo la ley de matrimonio igualitario. Recientemente, la oposición derechista salió derrotada, también, de las primarias. ¡No podemos permitir que estos sectores reaccionarios se salgan con la suya! ¡Que nada impida que podamos conquistar el derecho al aborto!
Para eso, no dejemos en manos de un puñado de legisladores, el destino de nuestros derechos. El movimiento de mujeres, las organizaciones feministas, sociales y políticas, y todos los trabajadores y trabajadoras, intelectuales, artistas y estudiantes que apoyamos este justo reclamo debemos poner en pie un movimiento de lucha, para movilizarnos –con independencia del gobierno y los bloques opositores- y hacer oír nuestra voz. Tenemos que conseguir que el proyecto presentado por la Campaña sea aprobado sin maniobras ni dilaciones, por nuestro derecho a decidir y porque no queremos ni una muerta más por abortos clandestinos.
----------------------
El controvertido artículo 86 del Código Penal
El artículo 86 señala bajo qué circunstancias NO es penalizado el aborto, desde 1921. Dice que “el aborto practicado por un médico diplomado con el consentimiento de la mujer encinta, no es punible: 1º. si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre y si este peligro no puede ser evitado por otros medios; 2º. si el embarazo proviene de una violación o de un atentado al pudor cometido sobre una mujer idiota o demente.” Sin embargo, el inciso 2º es objeto de variadas interpretaciones que llevan a que termine siendo la justicia quien decida ante cada caso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario